España es la segunda productora de almendra del planeta. En numerosos hermosos rincones de nuestra geografía puede contemplarse el espectáculo de estos campos. No sólo por estética, sino que también por la importancia económica que posee y los beneficios que aporta su consumo para el ser humano, nos encontramos ante un cultivo de incalculable valía.

Su recolección se desarrolla, principalmente, durante los meses de agosto y septiembre.

Aunque hay otros frutos secos en la provincia, la almendra ocupa 22.556 has, que generan 15.031 toneladas.

La Marcona es la variedad de mayor calidad. Una almendra redonda y con grosor, dulce y con poco porcentaje de acíbar. Es una de las más utilizadas, la más cara y la más demandada. También en nuestras tierras se cultiva la Llargueta y la Planeta.

Su consumo también ha experimentado un importante incremento y, por ello la lógica impone que el productor perciba un precio que, por lo menos, le permita mantenerse al frente de sus explotaciones y percibir valores que puedan cubrir los costes de producción o el abandono y la desertización irá en aumento.

Sus árboles en flor constituyen uno de nuestros paisajes más hermosos y uno de nuestros patrimonios más valiosos. Los productores también deberían contar con más apoyo por parte de la administración. Llevamos décadas reclamando que el turrón con Denominación de Origen de Alicante, tal y como reza su nomenclatura, sea elaborado únicamente con productos de nuestra tierra.