José Vicente Andreu y Carlos Baño exigen un pacto de Estado y un Plan Hidrológico Nacional que garantice este recurso con la calidad necesaria, en cantidad suficiente y a un precio asequible para asegurar la competitividad de la provincia. Ambas entidades reclaman que “se nos escuche como ciudadanos y empresarios de esta provincia, porque el futuro de Alicante pasa por el agua”, y reclaman reconocimiento y respeto hacia la iniciativa privada, esfuerzo y dinamismo durante estos últimos 43 años de funcionamiento del Trasvase Tajo-Segura.
ASAJA Alicante y la Cámara de Comercio de Alicante han llevado a cabo esta mañana un evento sin precedentes que ha reunido al tejido empresarial alicantino en bloque, así como a representantes de las sectoriales más importantes de la provincia, asociaciones empresariales, el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo Segura y las principales comunidades de regantes, con el objetivo de aunar fuerzas en la defensa del agua, que recientemente ha sufrido un duro varapalo con la aprobación de los planes hidrológicos de cuenca, que supone el recorte del Trasvase Tajo-Seguro mediante el aumento gradual de los caudales ecológicos.
El desayuno empresarial “Déficit hídrico de la provincia de Alicante: el agua, motor de futuro” ha supuesto un punto de encuentro y unión empresarial de las fuerzas vivas de Alicante en torno a un problema que no solo afectará a la agricultura, provocando el abandono agrario -que supondrá una merma de 27.314 hectáreas de regadío y miles de pérdidas de puestos de trabajo-, sino también de todos y cada uno de los sectores productivos que sustentan la provincia, debido a un efecto multiplicador que nos restará independencia y competitividad como territorio.
“El 10 de febrero se plasmó en el BOE, negro sobre blanco, una decisión política, injusta y sin criterio técnico que ha dejado herido de muerte al Trasvase Tajo Segura, esa obra de ingeniería que despertó a todo un país de su letargo, que glorificó al Levante convirtiéndolo en la despensa hortofrutícola de Europa, que nos hizo convertirnos en un modelo de agricultura sostenible para producir más alimentos con menos recursos y coste ambiental. Las regiones afectadas por el acueducto representan el 71% de la exportación nacional de hortalizas y el 25% de la de frutas con apenas el 3% del agua dedicada al regadío a nivel nacional, lo que demuestra una eficacia en el uso de este recurso sin precedentes. Desde ASAJA-Alicante lo hemos advertido, suprimir una infraestructura histórica que sí nos ha funcionado nos deja sumidos en la más absoluta incertidumbre”, ha manifestado el presidente de la asociación agraria, José Vicente Andreu.
De los originales 125 hm3 anuales que deberían haber llegado a Alicante por el trasvase Tajo Segura, tan solo han llegado aproximadamente la mitad, unos 65 hm3. “Y encima, ahora el Gobierno determina que en los próximos años tan solo llegaran 35 hm3 al año, apenas el 25% de lo que por la ley 52/80 que regula dicho trasvase nos correspondía”, denuncia ASAJA-Alicante.
Por su parte, el presidente de la entidad cameral, Carlos Baño ha requerido “más firmeza y convicción desde las administraciones públicas, en especial la autonómica en la defensa de los intereses de la provincia de Alicante”. Asimismo, Baño ha coincidido con Andreu en que la desalación no puede ser una solución: “El agua desalada incrementa sobremanera los costes, el proceso de desalación contamina y además su uso acaba empobreciendo y haciendo improductiva la tierra que se riega con ella. Y eso es letal a nivel económico, social y medioambiental”.
“Cada gota que ha llegado la hemos convertido en empleo y riqueza, que al final vía también los impuestos que pagamos va a la hucha común de todos los españoles. Si somos la quinta provincia que más aporta al PIB es en buena parte también gracias a la gestión que hemos hecho en esta materia”, ha añadido el presidente de la Cámara.
Ambas entidades, que unen sus fuerzas por primera vez en su historia para reivindicar y defender una cuestión vital para Alicante y para los ciudadanos de la provincia, han anunciado que, dentro de la estrategia de sensibilización adoptada por ASAJA-Alicante y Cámara de Comercio, están en conversaciones con las Cámaras de Comercio del sureste español y la Cámara de España, para realizar un acto conjunto y elaborar un manifiesto en defensa de un Pacto de Estado que asegure agua de calidad, en cantidad suficiente, de manera sostenible y a un precio asequible, especialmente en aquellas regiones donde el déficit hídrico es una amenaza real.
Por último, ASAJA-Alicante ha informado que, a pesar de que en Alicante tenemos la desaladora más grande de Europa, sus caudales no se quedarán en nuestra tierra más allá del 13% de su producción, el restante 87% la veremos marchar a Murcia y Almería.
En cuanto al agua regenerada, la provincia de Alicante es la que más aprovecha este recurso; en la Vega Baja prácticamente el 100% y, de media, el 71% a nivel provincial, frente al 7% nacional o el 3% de Europa. “Todo esto nos lleva a determinar que la provincia de Alicante será la gran perjudicada por el recorte del trasvase, y por eso no hay alternativa a tal recorte”, ha concluido el presidente de ASAJA.
“Insuficiencia hídrica y caudales foráneos”
Durante el encuentro, el catedrático de Geografía y rector honorario de la Universidad de Alicante, Don Antonio Gil Olcina ha pronunciado una magistral ponencia sobre “Insuficiencia hídrica y caudales foráneos”, en un profundo análisis de las posibilidades hídricas y el camino a seguir para contar con soluciones estables en materia de agua.
Olcina, posiblemente la voz más autorizada y contrastada para hablar de Agua en España, ha realizado un recorrido histórico de las decisiones que se han llevado a cabo en nuestro país respecto al agua que ha llegado al Levante español, a fin de que los asistentes comprendan cuál es la radiografía exacta a nivel técnico y geográfico, y cómo las erróneas decisiones políticas nos han llevado a la situación actual.
Es catedrático de universidad y ha sido director del Instituto Interuniversitario de Geografía de la Universidad de Alicante y de la revista Investigaciones Geográficas. Sus 250, 200 de ellas a título individual, versan sobre climas de la península ibérica, regímenes fluviales, alteración de los mismos por el hombre, usos del agua, propiedad de aguas perennes, actuaciones hidráulicas, y planificación hidrológica, así como sobre geografía histórica. En su haber cuenta con numerosos premios por su trayectoria académica, reconocimientos y distinciones de renombre, y ha dirigido y participado numerosos proyectos de investigación nacionales e internacionales.