La organización agraria alega en tiempo y forma contra el Plan de Acción Territorial de la Vega Baja (PATVB) y pide su retirada al interpretarlo como “un nuevo atropello al sector agrícola y ganadero por parte de la Administración”. El exceso de figuras restrictivas y las trabas burocráticas que plantea para las actividades primarias lo convierten en “una condena al desarrollo agropecuario de la Vega Baja”, en palabras del presidente de ASAJA Alicante, José Vicente Andreu.
Alicante, 29 de marzo, 2022. Pérdida de valor de los terrenos, imposibilidad de realizar actividades agrícolas y ganaderas, incompatibilidad con la vida rural y abandono del paisaje tradicional de la Vega Baja. Estas son las consecuencias que en opinión de ASAJA Alicante va a traer la aplicación del PATVB y los motivos que conducen a la organización a alegar contra el borrador del plan con la finalidad de que no entre en vigor. El proyecto, cuya base es el plan de ayudas por la DANA de 2019 Vega Renhace, está inspirado por “un fundamentalismo medioambiental que ignora los usos y costumbres que garantizan la viabilidad del entorno de la comarca”. «Los redactores de Vega Renhace han impulsado un plan nefasto para nuestro sector en vez de ayudarnos a paliar los efectos de la DANA y garantizar el futuro de la Huerta de la Vega Baja», opina José Vicente Andreu, presidente de la organización agraria, quien añade que “la preservación del entorno de la comarca pasa por garantizar la actividad humana en él y no su salida”.
El PATVB aplica restricciones a usos de suelo y construcción, en muchas ocasiones “sin estar respaldadas por criterios técnicos”. “El patrimonio ambiental y cultural de la Vega Baja no es, ni puede ser, concebible sin sus campos cultivados de hortalizas y cítricos, por lo que si el patrimonio ambiental que se quiere crear es la desertificación este es el camino a seguir”, zanja Andreu en su escrito.
Por ello, en el documento enviado a la Conselleria de Política Territorial, ASAJA Alicante recoge pormenorizadamente cinco bloques de alegaciones que señalan las deficiencias del PATVB antes de solicitar la retirada completa de este proyecto, aún en fase de redacción.
Protección que frena el desarrollo
Entre las críticas de ASAJA Alicante al plan se encuentra que protege algunas parcelas (zona 1) que no están cubiertas por ninguna figura de protección en otras normas de la Comunidad Valenciana, por lo que la organización se opone a la creación de nuevas medidas de este tipo. Además, el PATVB obvia reconocer y garantizar la preservación de la zona de la Huerta Histórica, de enorme valor patrimonial y productivo.
Las alegaciones de la organización son especialmente duras en lo relativo al retorno a cultivos de secano en la zona 5. ASAJA Alicante reprocha a los redactores del plan haber olvidado el impacto de la sequía en los cultivos de la zona y su necesidad de ayudas, las numerosas granjas de ovino y porcino existentes y las actividades cinegéticas, sin las cuales no se habría producido la conservación de la zona. ASAJA Alicante exige la creación de regadíos de socorro que garanticen los cultivos así como la permanencia de la caza y la ganadería.
La organización critica además que los restrictivos criterios para levantar construcciones agrícolas y viviendas. Para ASAJA Alicante, que se establezcan limitaciones tanto en suelo rústico como urbano pero a la vez se exceptúen para proyectos de placas solares es contrario a las directrices de la Administración y va en detrimento del sector primario.
El presidente de ASAJA Alicante informa a los redactores del plan de la inseguridad jurídica que genera la sobreprotección del PATVB, de mayor rango urbanístico que los planes urbanos municipales. «Los agricultores queremos que se mantengan nuestras parcelas como suelo no urbanizable común; no queremos protecciones medioambientales ni limitaciones ni ninguna más de las restricciones abusivas que impone la Administración en nuestro derecho de propiedad. Todas ellas suponen una pérdida patrimonial de forma directa», añade el presidente de ASAJA Alicante.
“Si añadimos a estas limitaciones la falta de rentabilidad, el abandono de terrenos será cada vez mayor y predominanará un paisaje empobrecido que no sostendrá ni la economía ni el medio ambiente”, concluye Andreu.
Por todos estos motivos, la organización reclama en su escrito la retirada completa del PATVB. Además, promoverá una recogida de firmas en rechazo del plan entre agricultores y ciudadanos de la comarca con el objetivo de que esta iniciativa nunca entre vigor.